El deporte competitivo, con los demás o con uno mismo, no suele ser físicamente saludable. Pero a muchas personas nos da un plus de vida y muchos momentos de felicidad.
¿Qué pasa por la cabeza de un ultratrailer? ¿Qué puede suponer para una persona caminar y correr 100 millas (más de 160 km) por montaña, en modo «non stop»? ¿Qué motivación tiene un individuo «normal» para ir al limite en lo físico y en lo mental?
Gentes diferentes, con existencias diferentes y con visiones de la vida y del deporte diferentes. Pero con un objetivo común: acabar para cumplir su reto.
El video no tiene desperdicio. Nos explica muchas cosas. Es un gran documento para entender qué pasa por la cabeza de esos locos y locas del ultratrail.
EhunMilak, el viaje de las 100 millas. from Ornitorrinco Collective on Vimeo.
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Estas vivencias me han servido para sobretodo; encontrarse a uno mismo. Los motivos e inquietudes para vivir una experiencia como tal están detrás de lo deportivo y físico. Sentir, compartir, sufrir, reír, correr, caer, fortaleza, debilidad,….són muchas cosas que te hacen ver que realmente eres y estas vivo. Lugares donde todos somos iguales, nadie es más que nadie. Aunque seas más rico o mas pobre, corriendo se unifican las condiciones. Vale la pena.
Saludos.
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Como dice el amigo de un amigo,…., la montaña pone a cada uno en su sitio. Las situaciones límite hacen salir lo mejor y lo peor del ser humano. Los deportistas que corremos/caminamos ultratrails, sabemos que nuestro límite físico y mental está siempre un poco más allá de donde nos pensábamos. Pura superación. No es una falacia, es un hecho constable.
Una ultratrail es una lección de vida…, una situación elegida de forma voluntaria, no impuesta, donde poder ponernos a prueba y experimentar unas sensaciones que en otra situación seria imposible.
Desde hace muchos años he practicado deportes en montaña, y hace poco tiempo que he descubierto la magia de las ultras. Esa sensación indescriptible de ser a la vez el más pequeño y el más grande del mundo. Las emociones contradictorias que se generan en la montaña, en pocos lugares se pueden llegar a producir con la misma fuerza. Las ultras me han dado la oportunidad de volver a sentir esas emociones, después de mucho tiempo.
En definitiva, la grandeza del deporte son las emociones que genera, que es lo que engancha a practicarlo… Es como una droga.
¡Me siento un privilegiado por ser un ultratrailer!
Oriol, igual nos encontramos un dia «triscando» por cualquier trialera….,
Molta salut per còrrer i ser feliç!
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